Publicado el 23/5/25

Del productor al artesano: cacao 100 % trazable y procedente del comercio justo

El chocolate es uno de esos placeres universales que transciende épocas y culturas. Sin embargo, cada haba depende de una industria en constante cambio. Como consecuencia del cambio climático, la pobreza extrema que afecta a los productores y diversas prácticas agrícolas insostenibles, estamos empezando a experimentar una escasez de cacao, así como el incremento hasta niveles récord de los precios y la incertidumbre en cuanto a su calidad. Ante la creciente complejidad del sector, la Maison Valrhona se esfuerza por avanzar hacia un sector del cacao de excepción colaborando estrechamente con sus socios productores para obtener un chocolate más justo y fomentar la resiliencia de los sistemas agrícolas.  

Plantation Millot Madagascar 2023

La lucha contra la deforestación, clave para el cacao del futuro

La deforestación es la principal fuente de emisiones de CO2 asociadas a la industria del cacao. Ante esta emergencia, el  Reglamento europeo relativo a la lucha contra la deforestación y la degradación forestal (EUDR) «tiene como objetivo prohibir la comercialización o la exportación desde el mercado europeo de productos que hayan contribuido a la deforestación o la degradación forestal después del 31 de diciembre de 2020».
Con el propósito de perpetuar la sostenibilidad de la industria del cacao, Valrhona se esfuerza cada día por ir un paso más allá de los estándares. Porque un chocolate excepcional solo se obtiene con las mejores condiciones. Un objetivo que se traduce en acciones concretas y cuantificables, articuladas en torno a tres ejes principales:

1- Aseguramos la trazabilidad de nuestras parcelas de forma precisa y nos cercioramos de que no se ubiquen en áreas protegidas

En 2024, se garantizó la trazabilidad del 100 % de las parcelas de cacao de nuestros socios, independientemente de su tamaño  (pese a que la ley lo exige para aquellas de 4 hectáreas). Para lograrlo, se han cartografiado todas las parcelas de nuestros socios productores, independientemente de su tamaño, mediante polígonos: una serie de puntos GPS que delimitan las lindes de cada parcela. A continuación, estos polígonos se cotejan con los mapas oficiales de cada país: un paso esencial para verificar que las parcelas no estén ubicadas en áreas protegidas. 
Por tanto, esta minuciosa labor resulta determinante para la creación de una cadena de suministro justa y sostenible, ya que nos permite conocer la procedencia de nuestro cacao, quién lo ha producido y en qué condiciones, así como asegurarnos de que ninguna de nuestras habas de cacao proceda de áreas protegidas.  

2- Analizamos el riesgo de deforestación a lo largo de un periodo de 20 años (frente a los 5 años que exige la ley)

La cartografía nos permite medir la modificación de las coberturas arbóreas mediante imágenes satelitales. Para ello, las coordenadas GPS de las parcelas de nuestros productores se cruzan con el histórico de los mapas de coberturas forestales de los últimos 20 años (frente a los 5 años que exige la ley) para comprobar que nuestro cacao no ha contribuido a la deforestación. 

Este análisis de la pérdida de la cobertura forestal a lo largo de 20 años nos permite determinar con precisión el cálculo de la huella de carbono de cada uno de nuestros cacaos. Para ello, en 2023 y con la colaboración de la ONG Nitidae, pusimos en marcha un programa para el cálculo de la huella de carbono exacta de cada parcela de cacao. El objetivo de este programa es averiguar el impacto de carbono de cada kilogramo de cacao que compramos e identificar posibles medidas para reducir las emisiones de carbono en función de cada origen.
Toda esta labor exhaustiva es posible gracias a las colaboraciones a largo plazo que mantenemos con nuestros productores de cacao (8,5 años de media).

3- La agroecología es una de nuestras prioridades 

El 60 % de nuestros socios ya implementa prácticas agroecológicas que permiten diversifican los cultivos, favorecer la biodiversidad y mejorar los ingresos de los productores. Puesto que preservar el cultivo del cacao a largo plazo es crucial, de aquí a 2030, nos comprometemos a expandir las prácticas agroecológicas al 100 % de nuestros socios, con el fin de garantizar la sostenibilidad de los cultivos y el bienestar de las comunidades. 
En cada región se procede se forma específica, adaptando siempre el proceso a las particularidades del terreno y la madurez de los métodos de producción. Desde 2018, se han puesto en marcha cuatro proyectos de gran envergadura en colaboración nuestros socios:  
- El proyecto Cacao Forest en República Dominicana y, más tarde, en Costa de Marfil 
- El proyecto de regeneración de jardines criollos en Haití
- El proyecto TRACTIONS y el proyecto de centro de aprendizaje colaborativo en Indonesia

Con nuestro apoyo, contribuimos a recuperar la biodiversidad y aumentar los ingresos de los productores: de 400 US$ por hectárea y por año a 1000 o 3000 US$ según los modelos. 

Descubra las acciones que ha puesto en marcha Valrhona para calcular la huella de carbono sobre el terreno, a través de los testimonios de Nans Mouret, experto en cacao de Valrhona, y Thomas Fabre de Nitidae.

 

Hacia un comercio del cacao 100 % justo en 2030

Dado que forjar el futuro del chocolate también conlleva preservar el mañana de las mujeres y los hombres que lo cultivan, hemos dado un paso decisivo hacia una industria del cacao más justa. Nos hemos propuesto certificar lo que llevamos haciendo desde siempre: apoyar a nuestros productores de cacao.

En 2025, el 30 % de nuestras compras de habas de cacao estarán certificadas según estándares reconocidos internacionalmente, como Fairtrade Maxhavelaar y Fair for Life (frente al 3 % en 2023). Un avance importante, hacia una meta clara: lograr que el 100 % de las habas estén certificadas como procedentes del comercio justo en el año 2030.  

Voyage Plantation - Cuvée Bali
Un planteamiento a largo plazo, con efectos concretos

En la actualidad, este paso al frente nos permite apoyar a las organizaciones de nuestros socios productores y, al mismo tiempo, satisfacer las expectativas crecientes de nuestros clientes profesionales y particulares: suministrar un chocolate excepcional, trazable y respetuoso a nivel social y medioambiental. 
Este enfoque se articula en torno a la continuidad, ya que Valrhona sigue apostando por sus colaboraciones históricas ―algunas de ellas ya cuentan con más de 30 años de antigüedad―, y las acompaña en su transición hacia la certificación. Los contratos se suscriben por un periodo mínimo de 3 años, aunque actualmente duran de media 8,5 años, lo que evidencia un compromiso a largo plazo.
Los proyectos de colaboración que llevamos a cabo se basan en los siguientes pilares principales: 

  • Condiciones de vida y trabajo dignas 
  • Preservación del medioambiente 
  • Valorización del saber-hacer 
  • Prácticas agroecológicas innovadoras 

La certificación nos permite varias cosas: de entrada, financiar las compras a los productores y entablar colaboraciones a largo plazo. Y, además, disponer de primas significativas, que reinvertimos en las comunidades con la construcción de escuelas y depósitos para facilitar el acceso al agua potable, o impulsar actividades que permitan generar ingresos a las mujeres y propicien su autonomía

Explica Aminata Bamba, responsable de Sostenibilidad de ECOOKIM

Plantation Millot Madagascar 2023

El Cuvée du Sourceur Côte d'Ivoire Bio 56 %: un claro ejemplo

Este Cuvée du Sourceur puro origen Costa de Marfil, con certificado de agricultura ecológica y cuyas habas se adquieren según los principios del comercio justo, encarna plenamente este compromiso.
Se produce a partir de habas cultivadas, fermentadas y secadas en el principal país productor de cacao del mundo, y representa a la perfección los valores de la Maison Valrhona y la cooperativa asociada con certificado Fairtrade con la que colabora desde hace más de 10 años. Esta colaboración a largo plazo, basada en la confianza mutua, nos ha permitido probar y, seguidamente, estructurar un sector justo y ecológico a gran escala en Costa de Marfil. Esta creación expresa todo el potencial de un cacao excepcional, cultivado respetando los ecosistemas y las comunidades locales. 

La agroecología es «el uso de los recursos y los mecanismos de la naturaleza para la producción agrícola. Aúna aspectos ecológicos, económicos y sociales y tiene como objetivo aprovechar al máximo las interacciones entre las plantas, los animales, los seres humanos y el medioambiente».

Agroforesterie en Haïti

Hacia un sector más responsable y sostenible 

Valiéndose de una trazabilidad avanzada (que va mucho más allá de lo estipulado en el Reglamento EUDR) y de los principios del comercio justo y la agroecología, Valrhona se compromete a construir una industria del cacao más responsable y sostenible. Estas acciones concretas contribuyen a la lucha contra la deforestación y a la preservación de los bosques, a proporcionar ingresos y condiciones de vida más justos a los productores y a la implementación de prácticas agrícolas respetuosas con el medioambiente. Gracias al trabajo en estrecha colaboración con nuestros socios productores, continuamos innovando e invirtiendo en soluciones sostenibles para forjar el futuro del cacao. 

Al estar convencidos de que el futuro del chocolate está íntimamente ligado al de los seres vivos, seguimos apostando por una acción colectiva y sincera junto a nuestros socios productores, artesanos y chefs para potenciar la riqueza de un chocolate excepcional y crear emociones inolvidables, siempre respetando a quienes lo cultivan.