No, no hace falta ir a buscar la comida del futuro a lo más recóndito de la selva amazónica ni a Papúa Nueva Guinea.
Busque más cerca, ante sus ojos, a unas cuantas brazadas de donde vive…
La contaminación, la sobrepesca y las disputas territoriales hacen sufrir al mar.
Y mucho.
Aun así, se calcula que bajo el mar viven más de 2500 especies comestibles y, además, estos animales, plantas y algas ni son perjudiciales ni contaminan. Estos alimentos potenciales podrían cambiar el panorama del mercado de la alimentación, en concreto con respecto al impacto ambiental. Entonces, ¿por qué no los comemos? Ya hay quien se ha puesto manos a la obra para cambiar el paradigma, y a esta corriente se la conoce como Blue Food (comida azul).
En España —el principal país consumidor de pescado de la UE—, nadaremos entre estos productos de la mano de los mejores artesanos, chefs pasteleros y cocineros de Barcelona.





































